 Turístico por excelencia, en Noviembre en semi-letargo, luce sus mejores galas. Cielo azul espléndido, y las playas con algún surfista preparado a desafiar las magníficas olas, que han ido tallando islotes, roquedales, acantilados, un paisaje de ensueño que invita a la contemplación y a la paz.
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Otrora marinero, disfrutarás en cada uno de sus paseos. Especialmente el recorrido hacia el faro, ascendiendo con la brisa en la cara, el rumor y olor del mar.
 No podrás evitar pararte a contemplar la playa de los locos, magnífica , simas, y roquedales, y al fondo, majestuosos observándolo todo, Los Picos de Europa.
Decidimos hacer una excursión a Las Dunas de Liencres, Cabo Mayor , y Santander, bajo un cielo turbio, amenzante,viento y brisa fresquita, que lejos de molestar ayudaron a configurar una visión única de una zona excepcional, que deleita y regocija en cualquier época del año.
Gastronomía magnífica en toda la región, y diversidad de alojamientos, muy aconsejable visitar en esta época del año, despojada de toda masificación, más agreste y poderosa, y sobre todo más barata.
Disfrutamos junto con unos amigos, de un fin de semana maravilloso, sin agobios, con la serenidad y quietud que produce el mar o "la mar"
A.Dipe
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